Actividades Asociadas con el Trabajo de Comunidad


Por su naturaleza, las encuestas y las investigaciones que realiza la Dirección están a menudo asociadas con actividades de beneficio para las comunidades. Son numerosas e incluyen desde la atención médica en zonas donde ésta no existe o no es accesible, hasta la orientación alimentaria, la capacitación de amas de casa y promotores locales, la distribución de suplementos, la desparasitación, la salud reproductiva y otros programas aplicados de atención primaria a la salud. La sistematización de estas actividades han permitido generar modelos de atención que han probado su eficacia y cuya aplicación podría extenderse a programas asistenciales con el respaldo técnico del Instituto. Uno de estos modelos es el Programa Integral de Alimentación y Nutrición PIAN que consiste en la vigilancia de la alimentación y la nutrición articulado con sistemas de prevención y atención oportuna de riesgos y daños a la salud, que fue una propuesta de la Dirección hace 20 años y que se ha desarrollado instrumental y metodológicamente.

El PIAN se inició en forma piloto en 1992 en 4 localidades del estado de México en colaboración con el DIF estatal y se escaló en 1993 en el estado de Morelos en colaboración con SEDESOL, CONAFE, el DIF estatal y varias ONG. En agosto de 1995 se firmó un convenio con el Sistema DIF Nacional para la atención primaria de niños en el estado de México en la ex Hacienda de Solis con notables resultados en la disminución de la desnutrición y de la mortalidad infantil. Como parte del programa se han realizado actividades sistemáticas de atención medica primaria a los cerca de 15 000 habitantes de las comunidades aledañas y el adiestramiento de personal paramédico para la realización de dichas actividades.

El modelo PIAN opera ahora, con asesoría de nuestro personal, en varios estados cubriendo a unos 30 mil niños en mas de mil comunidades marginadas a los que se evalúa y vigila dándoles atención médica, vacunaciones, orientación alimentaria y, cuando es procedente, suplementación. El modelo ha sido adoptado con éxito por el programa “Un kg de ayuda” y ha captado el interés de la Cruz Roja internacional y del programa “Médicos sin fronteras”.

Otro modelo es el que lleva al cabo el Dpto. de Estudios Experimentales Rurales en Oaxaca al través del CECIPROC. Se trata de un modelo innovador de atención primaria a la salud y a la nutrición que ha merecido un premio de la Fundación Mexicana para la Salud y que se basa en la capacitación de promotores indígenas que inducen la participación multiplicadora de la comunidad Por medio de 45 talleres se ha capacitado hasta ahora a tres generaciones de promotores indígenas y se ha apoyado su labor con un boletín trimestral, manuales de trabajo (sobre los temas: nutrición comunitaria, ecología y etnobotánica, salud comunitaria, educación y salud comunitaria) y de capacitación, folletos, juegos de mesa, canciones infantiles y obras de teatro originales desarrollados con la comunidad.

Estas actividades han dado a las comunidades instrumentos para sobreponerse a inundaciones, sequías, terremotos y otros desastres naturales y ha demostrado que la desnutrición se puede manejar a bajo costo y con los recursos locales y que en vez de competir, la medicina científica y la tradicional pueden coexistir y potenciarse mutuamente en forma eficaz en el esfuerzo por la equidad y democratización de la salud.

Estas actividades en Oaxaca son particularmente diversas e interdisciplinarias y corresponden con la idea de investigación-acción inmediata ya que se trata de investigación que desencadena una serie de actividades aplicadas, de cuyo resultado se parte para hacerse nuevas preguntas (por ejemplo en aspectos micológicos, parasitológicos, de salud reproductiva y genero, sobre el paludismo y sobre etnobotánica para sistematizar la herbolaria local), de manera que por un lado se contribuye al conocimiento y por el otro se resuelven problemas inmediatos.

En Chiapas, el Dpto. de Vigilancia Epidemiológica mantiene desde hace muchos años una unidad que ha generado un modelo para la atención de refugiados desde 1982 por la erupción del volcán Chichonal y luego por los refugiados guatemaltecos y los desplazados por el movimiento zapatista, que ha merecido el encomio y la atención de ACNUR (Alto Comisionado de las Naciones Unidas para la Atención de Refugiados) y de la Comisión Mexicana de Refugiados de la Secretaría de Gobernación)

 

 

ACTUALIZACIÓN
Dirección de Nutrición
Agosto 2019