Recomendaciones sobre COVID-19 en oftalmología

En la actual pandemia, una de las vías de transmisión del SARS-Cov2 es el tejido conjuntival. La exposición directa a secreciones respiratorias o por la inoculación del virus por el contacto de manos contaminadas.

En un estudio realizado por Xia y cols1, se reportó la presencia de SARS-Cov-2 en muestras de lágrimas y secreción conjuntival en uno de treinta pacientes con COVID-19. En otro estudio2, describieron como síntoma la “congestión conjuntival” en 9 de 1.099 pacientes (0,8%) con COVID-19 confirmado.

Dado lo anterior, se han implementado medidas de protección ocular como el uso de gafas de seguridad o mascarillas faciales.
 

Medidas de protección ocular:

Actualmente, existen en el mercado diferentes lentes de protección. Bajo la premisa de que cualquier protección que evite el contacto con la conjuntiva y el ojo es mejor que no usar protección, en caso de encontrarse disponible en el medio, lo que se recomienda idealmente es utilizar aquellos lentes de protección que cuenten con las siguientes especificaciones:

• Contar con la norma de seguridad ANSI/ISEA 287.1-2015
• Material: policarbonato, ya que este material es muy resistente y ligero.
• Ajustables: esto es con puentes nasales antideslizantes y varillas ajustables para mayor comodidad y protección. Elija aquellas que se ajusten más a la piel para cubrir todas las zonas de exposición incluyendo los laterales para mayor protección.
• Ventilación indirecta: Impide el ingreso de partículas o salpicaduras de líquidos.
• Tratamiento anti-empañante: Prologan la vida de los lentes y mejoran la visión del usuario. En ocasiones el sellar bien el cubrebocas con cinta microporosa sobre la nariz disminuye el empañamiento.
• Visión panorámica: para tener una visión mas amplia

Para usarlas correctamente se recomienda:

• Lavar correctamente las manos antes de colocarlos y después de quitarlos
• Lavar los lentes antes de usarlos incluyendo las lentes oftálmicas que vaya a utilizar por debajo.
• Colocarlos antes de comenzar cualquier actividad donde haya peligro de contaminación.
• Una vez colocados los lentes, no se deberán volver a tocar hasta que no se hayan lavado las manos previamente.
• En caso de utilizar gafas desechables, debe colocarlas en un sitio tapado y seguro destinado para desechos con peligro biológico.

Otras recomendaciones que se sugieren durante una evaluación oftalmológica necesaria son:

• No utilizar oclusores ni estenopeicos para la toma de AV. ³
• Si es necesario emplear gotas oftálmicas, es necesario cerciorarse que no haya contacto con las pestañas del paciente e idealmente estás se instilarán con guantes. Asimismo, se utilizarán preferentemente colirios monodosis, los cuales se desecharán por cada paciente.
• Si se tiene que llevar a cabo la aplicación de un tratamiento oftalmológico en gel o pomada, se debe lavar las manos con jabón y agua antes y después, recordando evitar el contacto directo con el ojo o pestañas.

Uso de lentes de contacto

• Se desinfecte diariamente cualquier tipo de lente de contacto con peróxido de hidrógeno al 3%.
• Es de suma importancia que los usuarios de lentes de contacto no suspendan autocuidados como el aseo de manos antes y después de colocar y quitar los lentes en el ojo.
• Si presenta síntomas como ojo rojo u otra molestia ocular asociada a conjuntivitis, se sugiere suspender el uso y desechar el lente
• Si presenta síntomas de resfriado evite el uso de LC.
• Se sugiere comenzar a utilizar lentes de contacto desechables diarias y tirarlas cada noche.
• Limpie el estuche en el que guarda las lentes de contacto con la solución multipropósito y deje secar al aire libre.
• En los pacientes con diagnóstico confirmado de COVID-19, y sean usuarios de lentes de contacto se recomienda suspender el uso y desechar el lente de contacto. Si presenta alguna otra molestia contactar con su especialista.

Uso de Cloroquina (CQ) o Hidroxicloroquina (HCQ)

El uso de cloroquina o hidroxicloroquina ha sido utilizado en ensayos clínicos como tratamiento en el manejo del paciente con COVID-19. Esto ha generado incertidumbre por sus posibles complicaciones por toxicidad a nivel de retina. Sin embargo, estudios 4 refieren que aún con dosificaciones altas, la incidencia de retinopatía por toxicidad es poco frecuente en un lapso menor a 10 o más años de uso.

De igual manera, en estudios previos de enfermedades crónicas no se reportaron hallazgos de pérdida visual con el uso el HCQ en dosis de 1200 mg / día durante 4 a 8 semanas como dosis inicial.⁴

Por tal motivo, no se sugiere realizar tamizaje oftalmológico en pacientes que estén bajo esta terapia o hayan sido tratados con alguna de ellas durante el manejo por COVID-19; ya que el uso de estos dos medicamentos representa un porcentaje de riesgo muy bajo para la predisposición de retinopatía tóxica en tan corto tiempo.

Probablemente estas recomendaciones puedan ir cambiando de acuerdo a nuevos hallazgos.

L.O y E.D.C. Verónica Yazmín Zurita Cortés
Oftalmología-CAIPaDi



Referencias bibliográficas: