El departamento surge en 1960, a partir de la necesidad de formar servidoras y/o servidores públicos que comenzaran a atender el problema de desnutrición a lo largo del país. El Maestro Zubirán formó un grupo de trabajo que integró al departamento de Educación Nutricional, desde el principio tuvo el apoyo de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO). Su primer objetivo fue iniciar la formación de servidoras y servidores públicos con capacidad de planear los programas estatales de nutrición.
En 1962, se establecieron 4 coordinaciones en Investigación, Capacitación, Economía Doméstica y Comunicación Social. Para 1966, se investigó si era posible acabar con la desnutrición infantil, utilizando solo recursos rurales de una de las comunidades más pobres del estado de Oaxaca. Así como también se desarrollaron programas de diagnóstico nutricional vigente y de asistencia técnica, por medio de la orientación e implementación de programas que contribuyeron a mejorar la alimentación y nutrición de la población.
Entre 1968 a 1972, se trabajó con un curso monográfico de nutrición de comunidad para profesionistas en dietética y nutrición, para incorporar la epidemiología y la salud pública en las servidoras y servidores públicos que estuvieran trabajando en provincia. De la misma forma se desarrollaron cursos tutoriales para médicos, antropólogos y sociólogos incluyendo estudiantes invitados de los países de Bélgica, Francia, Holanda y Suiza.
En 1968 a 1980, el Departamento fue uno de los primeros en contar con un laboratorio de Técnica Culinaria, cuya función era estandarizar las preparaciones previamente calculadas, raciones de preparaciones, así como la medición de alimentos, a partir de utensilios caseros.
En los años posteriores (1970 y 1984), se inician cursos de educación continua para estudiantes de la licenciatura de Nutrición, docentes de la Dirección General de Educación Media de la SEP. Así como para guarderías del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), entre otros.
De 1972 a 1975, surge el programa de Orientación Familiar apoyado con el Instituto Nacional de Protección a la Infancia (INPI) en el que se utilizaron conocimientos y técnicas alimentarias, previamente aprobadas en una investigación de 27 años en Tezonteopan, Pue. Este programa llegó a 2 millones de madres, siendo la base a muchos otros programas que posteriormente se llevaron a cabo.
Años posteriores surge el programa gubernamental de “Desarrollo Rural” donde trabajaron 400 promotoras de la zona Mixteca, Zapoteca; Mixe y Tlapaneca de Guerrero. Siendo apoyado por la Secretaría de la Presidencia y aplicado en otras 20 regiones de la república.
Para 1980, surge el departamento de Nutrición Aplicada, con la función de asesoría y asistencia técnica a los organismos gubernamentales y privados. Fusionándose posteriormente con el departamento de Educación Nutricional, conformándose así el actual departamento de Nutrición Aplicada y Educación Nutricional.
En los siguientes años (1982 a 1987), las universidades de California y de Connecticut apoyaron una investigación (dieta deficiente en la población rural) que duró 3 años. En esos mismos años surge el programa integral de apoyo a la nutrición (PIAN) en los estados de Chiapas y Tabasco, así como con refugiados guatemaltecos de la zona de Margaritas y Comitán Chiapas. En los años posteriores, se lleva a cabo un proyecto con una harina de maíz enriquecida, diseñada por el Departamento para mejoramiento del estado nutricional de madres y preescolares del estado de México, Hidalgo y Veracruz. Además, se elaboró un instrumento para medir el desarrollo de infantes de 18 a 24 meses de zonas rurales marginadas.
Para el año 2000, se llevó a cabo un proyecto de investigación en niños lactantes y preescolares, sobre su desarrollo mental y psicomotor, relacionado con su alimentación. De igual manera se creó una unidad médico asistencial en la cual se atendían urgencias, partos y atención pediátrica.
Para los años subsecuentes, se trabajo con la Secretaría de Salud del estado de Yucatán en el programa de combate a la desnutrición infantil, dirigida a la población infantil de 20 comunidades. Así como se ha trabajado en el programa integral de apoyo a la nutrición y al neurodesarrollo (PIANN) en el cuál fue validada una prueba de tamiz de neurodesarrollo infantil (PTNI) para lo que se realizaron 57,000 aplicaciones en niños de 12, 18, 24, 36 y 48 meses de edad.
Se llevaron a cabo investigaciones de la encuesta sobre la alimentación, nutrición y salud en la población indígena de la sierra tarahumara, realizada en 26 localidades rurales de 8 municipios serranos, participando 500 familias y más de 700 preescolares. Así como también se ha colaborado en la coordinación con Proeducación Institución de Asistencia Privada (IAP) en la realización del programa vida sana en escolares. Mientras que con la Secretaría de Educación Pública y del Gobierno de la CDMX se creó el programa salud arte (SaludArte), para niños de educación primaria de zonas marginadas, que reciban comida diariamente en la escuela.
A partir del año 2015 se implementaron estrategias integrales para llevar a cabo el Registro Nacional de Peso y Talla en Escolares (RNPT), lo que permitió que a partir la colaboración de las 32 entidades federativas y sus representantes del sector salud y educación se contara con un diagnóstico del estado de nutrición de la población que asiste a escuelas primarias en sus modalidades: pública, privada, indígena y CONAFE.
Mediante la colaboración con el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia se logró consolidar además de la evaluación y seguimiento del estado de nutrición, el neurodesarrollo en la población que acudía a las estancias infantiles durante el periodo 2017-2019, las evaluaciones se realizaron en más de 10 mil centros educativos en donde se determinó la situación de 300 mil menores de 3 años mediante la aplicación de Cédula de Evaluación del Desarrollo Infantil (EDI).
En resumen, a lo largo de sus 65 años el Departamento ha dedicado todo su interés apoyando diversos proyectos gubernamentales y privados, a través de asesoría, investigación y desarrollo de programas, con el fin de mejorar la alimentación de la población, especialmente de los más vulnerables y de zonas marginadas.